noble caja de madera,
tienes forma de mujer
mi eterna y fiel compañera.
Te acurrucaste en mis brazos
desde que yo era pequeña,
conociendo mis desvelos
mis alegrías y penas.
Ya eres parte de mi cuerpo
tu mástil es mi bandera,
tu sonido es el motivo
que cante con mi alma entera.
Por que tú me das la fuerza
para seguir por mí huella,
eres alma del que canta
y consuelo de sus penas.
Tú me estabas esperando
desde antes que yo naciera,
voló tu semilla al viento
te acunó la madre tierra.
Fueron pasando los años
y en un árbol te escondieras
fuiste el regazo de pájaros
que en tus ramas vida dieran.
Y había un canto escondido
en tu alma fiel de madera,
que lo había puesto Dios
para que el hombre lo sienta.
Como árbol podrías morir
si alguna ves te secaras,
como guitarra hechas raíces
en el alma del que canta.
Espiritual alimento
de quien te pulsa con ganas,
y te acompañan los duendes
con el ángel de Atahualpa.
Árbol que puedes cantar
con la guitarra de tu alma,
Dios ha elegido tu esencia
y así te inmortalizara.
Hoy mis manos te acarician
cuando interpreto una zamba,
y en la surera milonga
somos almas hermanadas.
Hemos llorado en silencio
cuando cantamos vidalas,
y en ritmo de chacarera
la Telesita nos baila.
Mi alma tiene tu forma
tus cuerdas son mi garganta,
tu diapasón mi consuelo
y tu puente mi esperanza.
Tu boca mi inspiración
tu clavijero mi gala,
tu caja mi vocación
y tus costados mi estampa.
Yo siempre viviré en ti
y tú vivirás en mi alma,
y el día que yo me muera
mi cuerpo abone tus ramas.
Mónica Aicardi.
La autora es una cantante que ha estado en Cosquín, apadrinada por Vitillo Ábalos !!!!!
Extraído de: Rincón mágico de poetas.ning.com
